Ellos están siempre ahí, pululan por el bosque, a todas horas incluso de noche, cuando el bosque se ilumina con las lucecillas de las luciérnagas.
¡Cómo! ¿Qué no los ves?, ¿Sabes porqué?, porqué la única forma de llegar hasta ellos, el único camino posible de llegar hasta este bosque es,
A través de nuestra imaginación y nuestra fantasía.
Verás, haz la prueba. Cierra los ojos, imagina que estás paseando por el bosque y de pronto, tras un árbol aparece un duendecillo y al arrancar una seta, aparece otro protestando muy enfadado porque le has dejado sin casa, ¿Ya los ves?, ¿Aun no?, ¿Ahora? Si..... ¡Ya los ves!
¿A qué son preciosos? Pues en nuestra mano está, que sigan existiendo, háblales de ellos a tus hijos y nietos. Mientras nosotros tengamos imaginación y fantasía, seguirán viviendo eternamente, pero sin estas dos cosas, morirán irremediablemente, porque entonces, no tendrán a donde ir y los niños que vendrán después de nosotros no tendrán el privilegio de conocerlos y disfrutar con ellos.
No permitas que eso ocurra, ¡Se imaginativo y deja volar tu fantasía!
Julia L. P.
Mejor expresado imposible,eres estupenda Julia.
ResponderEliminarBesos grandes de magia.
Gracias guapísima,ya se que estos temas nos van a las dos. Besitos
EliminarYo por mi tierra me encuentro por la orilla de los regatos , trasnos, divés, y en la Galicia más profunda todos conocen a las Mouras desde tiempos ancestrales , chicas rubias que tienen la facultar de hacerse sumamente pequeñas si lo estimann y te cubren de hechizos , cambiando el destino de tu vida , claro que ya sabes soy gallego y "no creo en ellas pero haberlas hailas! y nos conocemos.
ResponderEliminarTu entrada como siempre dulce y muy entrañable.
besos.
Que lugar lindo e encantado que achei por aqui.
ResponderEliminarParabéns!!!
Beijinhos de magia.
Lua
Hola Julia, yo creo que ya nacemos con ese entinto de que la naturaleza tiene sus propia magia.
ResponderEliminarUn abrazo.
Los ví y son preciosos, gracias Julia por guiarnos en ésta bella fantasía, aunque te confieso que para mi es realidad.
ResponderEliminarBesitos.