Oculto en una pequeña aldea de Victoria en Marysville, sudeste de Australia, se encuentra un mundo mágico donde el escultor Bruno Torfs lleva 25 años contribuyendo con su obra a combinar la belleza de su arte con la belleza de la naturaleza que lo rodea.
Después de varios años de vivir así, el escultor paraguayo Bruno Torfs y su familia deciden irse a Australia para crear un jardín con sus esculturas que sea a la vez una atracción permanente. Tras encontrar el sitio ideal en la pequeña aldea en cinco meses consigue abrir el parque al público. Bruno comenzó con apenas 15 esculturas y a día de hoy se pueden encontrar más de 400 y continúa añadiendo algunas cada cierto tiempo.
Bruno, se quedó a vivir en Australia con su familia en ese espacio de selva tropical que el compró para poder vivir y convivir también con sus obras.
Podéis visitar su web oficial en www.brunosart.com
Aquí les dejo algunas imágenes de este maravilloso bosque, hay muchas mas esculturas pero sería interminable ponerlas todas.
Buenas noches Julia!!!!
ResponderEliminarQué lugar tan bonito para vivir.
Un beso enorme
¡¡¡Impresionante!!!
ResponderEliminar¡¡¡Gracias por compartir tanto Arte mimetizado con la extraordinaria Naturaleza!!!...Una belleza.
Un abrazo.
Hola Julia, que maravilla que magia. Tu rincón es tanbien muy especial, gracias por compartir.
ResponderEliminarUn tierno abrazo.
Hola Julia,me encanta!!siempre he sabido de la existencia de la magia y ese bosque sin duda es mágico.
ResponderEliminarBesos
Teresa
Impresionante!! Gracias!
ResponderEliminarUna hermosura Julia, ya lo conocía pero no me canso de admirarlo.
ResponderEliminarGracias por tus visitas a mi espacio y tus cálidos comentarios.
Buen comienzo de semana.
Besos.